Una de las prioridades en el ámbito de la investigación en enfermedades raras es la identificación de nuevas estrategias terapéuticas. El mayor reto al que se enfrentan los investigadores que están desarrollando nuevas terapias para estas enfermedades es poder trasladar esos resultados del laboratorio a la práctica clínica diaria. La Unión Europea (UE) define a esta clase de terapias como aquel producto destinado a una indicación cuya prevalencia no exceda los cinco casos por cada 10.000 habitantes, siendo además una enfermedad que pone en riesgo la vida, que es muy debilitante, es una condición grave y crónica o para la cual no haya en la UE ningún método satisfactorio de diagnóstico, prevención o tratamiento autorizado. Si existe algún método, entonces el medicamento tiene que demostrar que proporciona un beneficio significativo comparado con el producto ya autorizado.

Hay aproximadamente 7.000 tipos diferentes de enfermedades raras y los investigadores calculan que hay más de 300 millones de personas en todo el mundo que viven con una enfermedad de este tipo. Sin embargo, solo el 6% de las enfermedades raras tienen al menos un tratamiento aprobado, que se conoce como medicamento huérfano. Con más del 40% de todos los medicamentos en fase de desarrollo dirigidos a enfermedades raras, y alrededor de 50 nuevas terapias aprobadas en todo el mundo cada año, el futuro para aumentar el número de tratamientos disponibles se antoja positivo.

En España, la Comisión Interministerial de Precios de los Medicamentos (CIPM) dio luz verde a la financiación de 49 medicamentos durante 2024, siendo 14 de ellos medicamentos huérfanos, lo que se traduce en nueve menos que el año anterior. Pese a este descenso, la reciente Estrategia de la Industria Farmacéutica identifica como áreas prioritarias de inversión para la industria farmacéutica a las enfermedades raras. En concreto, argumenta que estas patologías suponen una carga significativa para pacientes y familiares a causa del retraso en el diagnóstico, la inexistencia de tratamientos y la afectación de la calidad de vida, subrayando que la inversión en este conjunto de patologías no solo mejora directamente la vida de los pacientes y sus familias, sino que también impulsa avances científicos más amplios.

La CIPM dio luz verde a la financiación de 49 medicamentos en 2024, siendo 14 de ellos huérfanos, lo que se traduce en nueve menos que el año anterior

La Estrategia de la Industria Farmacéutica 2024-2028 puede ser un potente motor para consolidar el liderazgo de España en I+D biomédica, con especial atención a la investigación básica, traslacional y a las áreas huérfanas, así como para mejorar los tiempos en el acceso a los nuevos medicamentos para que los pacientes tengan a su alcance y en el menor tiempo el mejor de los tratamientos innovadores posible”, admite Farmaindustria a través de un comunicado.

El informe de 2024 elaborado por la Asociación Española de Laboratorios de medicamentos huérfanos y ultrahuérfanos (AELMHU) evidencia avances en el acceso a medicamentos huérfanos tanto en Europa como en España. “Los datos continúan reflejando que el futuro de los tratamientos huérfanos sigue siendo positivo, lo que representa una buena noticia para todos aquellos pacientes y familias que todavía no han encontrado un diagnóstico o tratamiento para sus patologías y miran a la innovación farmacéutica con gran esperanza”, explican desde AELMHU a esta revista. Sin embargo, recuerdan que “no hay que olvidar que solo el 6% de las enfermedades raras dispone de tratamiento, por lo que hay que seguir manteniendo e incrementando, entre todos, el esfuerzo para que este porcentaje crezca”.

AELMHU considera clave seguir trabajando en los desafíos que aún persisten en España. “Nos preocupa especialmente el tiempo que trascurre desde que el fármaco llega a España hasta que está disponible en un hospital”, afirman. Igualmente, admiten que “debemos esforzarnos para que el tiempo que la Administración y las compañías necesitan en la negociación de precio-reembolso no frene el acceso de los pacientes a los tratamientos que necesitan”. Por ello, insisten en seguir colaborando por un modelo de acceso temprano.
Para que el acceso sea más rápido creen que sería necesario apostar por un modelo de evaluación y financiación diferenciado y que sea consensuado, transparente y ágil. “Debemos tener en cuenta que, más allá de porcentajes y números, estamos hablando de personas con una enfermedad minoritaria. Desde AELMHU creemos que los medicamentos huérfanos y ultrahuérfanos no pueden ser evaluados de la misma manera que los tratamientos para patologías más frecuentes y prevalentes”, aseguran.

Actualmente, España financia el 58% de los medicamentos huérfanos autorizados en la UE, alcanzando los 85 productos financiados por el Sistema Nacional de Salud. No obstante, argumentan que “aún quedan 16 medicamentos huérfanos aprobados a nivel europeo que no disponen de Código Nacional y de los que ya lo tienen, 46 están sin financiar”. “Creemos que los próximos cambios regulatorios en materia de evaluación, financiación y fijación de precio deberían proteger estos avances para que se impulse y se atraiga la confianza de compañías farmacéuticas a España y, sobre todo, se facilite y agilice el acceso de la innovación para los pacientes con enfermedades minoritarias”, expresan desde AELMHU.

Para hacer frente a los obstáculos a los que se enfrentan las compañías al desarrollar y comercializar medicamentos huérfanos en España, desde la asociación están promoviendo un enfoque de evaluación más flexible para los medicamentos huérfanos, que tenga en cuenta las características específicas de las enfermedades raras, como la baja prevalencia y, por ende, la falta de comparadores. A continuación, están impulsando la creación de mecanismos de acceso temprano a medicamentos huérfanos. Por último, están fomentando y fortaleciendo el diálogo y colaboración entre las administraciones, la industria farmacéutica y otras partes interesadas para garantizar que estas terapias lleguen a todos los pacientes.

Ensayos clínicos puestos en marcha

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) publicó los datos que hacen balance de los ensayos clínicos autorizados en España en 2024. De este modo, este balance deja entrever el creciente interés que suscitan los medicamentos huérfanos para el tratamiento de enfermedades raras. Si bien es cierto que se trata de fármacos más costosos por el escaso número de pacientes, los datos de ensayos dejan claro que las compañías innovadoras han puesto el foco en esta área de investigación. El organismo regulador español dio luz verde a 204 ensayos clínicos para este conjunto de patologías, suponiendo un 22% del total.

España está entre los primeros países a nivel mundial en investigación clínica en estas patologías con 1.052 ensayos clínicos en desarrollo en los últimos cinco años. Los resultados de este empuje a la innovación en enfermedades poco frecuentes se han visto reflejados en las aprobaciones de nuevos medicamentos por parte de Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) el año pasado, cuando uno de cada tres nuevos principios activos autorizados fue identificado como medicamento huérfano.

La industria farmacéutica innovadora está fuertemente comprometida con estos cometidos y un año más Farmaindustria ha sido entidad colaboradora de la campaña anual de Feder por el Día Mundial de las Enfermedades Raras, que se celebra el 28 de febrero. En esta edición, el lema elegido es pERsonas, cuyo objetivo es visibilizar la realidad de más de tres millones de personas y sus familias en nuestro país. “El diagnóstico es un laberinto lleno de incertidumbre. Pero detrás de cada cifra, de cada enfermedad, hay personas y familias que necesitan apoyo y soluciones reales”, recuerdan desde Feder.

No obstante, Farmaindustria subraya que este esperanzador compromiso de la industria farmacéutica con la investigación en medicamentos huérfanos no es suficiente. “Tanto las compañías farmacéuticas como la Federación Española de Enfermedades Raras (Feder) piden a los gobiernos nacional y autonómicos más inversión en investigación y también más incentivos para seguir impulsando la I+D biomédica en esta área”, reiteran.

Situación en Europa

El marco de la UE para los medicamentos huérfanos pretende fomentar el desarrollo y la comercialización de medicamentos para pacientes con enfermedades raras ofreciendo incentivos a los promotores. El Comité de Medicamentos Huérfanos (COMP, por sus siglas en inglés) de la EMA revisa las designaciones de medicamentos huérfanos en el momento de la aprobación para determinar si la información disponible hasta la fecha permite mantener la condición de huérfano del medicamento y concederle diez años de exclusividad comercial. A pesar de todos estos esfuerzos, los últimos datos disponibles muestran que en 2024 se confirmó la designación de huérfanos de quince medicamentos, mientras que el año anterior fueron 17.

La Agencia Europea de Medicamentos confirmó la designación de huérfanos de quince medicamentos en 2024, mientras que en el año anterior fueron 17

Los medicamentos huérfanos a los que la EMA dio luz verde fueron: Elahere, Hetronifly (serplulimab, Henlius), para el tratamiento del cáncer de pulmón de células pequeñas en estadio extenso; Vyloy (zolbetuximab, Astellas), para adultos con adenocarcinoma gástrico o de la unión gastroesofágica; Zynyz (retifanlimab, Incyte), utilizado en adultos para tratar el carcinoma de células de Merkel, un tipo de cáncer de piel, que no puede curarse mediante cirugía o radioterapia; Winrevair (sotatercept, MSD), en combinación con otros tratamientos para la hipertensión arterial pulmonar (HAP); Emcitate (tiratricol, Rare Thyroid Therapeutics), para el tratamiento de la deficiencia de MCT8 (síndrome de Allan-Herndon-Dudley); Iqirvo (elafibranor, Ipsen) y Seladelpar Gilead (seladelpar lisina dihidrato, Gilead), para la colangitis biliar primaria (CBP); Adzynma; Altuvoct (efanesoctocog alfa, Swedish Orphan Biovitrum), para el tratamiento y profilaxis de las hemorragias en pacientes con hemofilia A; Fabhalta (iptacopan, Novartis), para el tratamiento de adultos con hemoglobinuria paroxística nocturna (HPN); Voydeya (danicopan, Alexion), para adultos con hemoglobinuria paroxística nocturna (HPN); y, Akantior (polihexanida, SIFI), para la queratitis por acanthamoeba.

Por otro lado, en la implantación del nuevo reglamento de evaluación de tecnologías sanitarias (HTA, por sus siglas en inglés) en la UE, que ya se ha hecho efectiva, una de las partes de este marco normativo consiste en la realización de evaluaciones clínicas conjuntas (JCA, por sus siglas en inglés). Concretamente, estas evaluaciones comenzarán a aplicarse en medicamentos huérfanos en 2028.

AELMHU destaca la necesidad de que la nueva legislación europea continúe impulsando la investigación y el desarrollo de tratamientos para enfermedades raras, eliminando las barreras burocráticas y equiparando y agilizando el acceso a los tratamientos para todos los pacientes de enfermedades raras en la UE.

Para Farmaindustria también resulta crucial poner la mirada sobre la revisión de la legislación farmacéutica europea, en debate en estos momentos, para que proteja los logros del Reglamento sobre Medicamentos Huérfanos, “que tanto bien ha hecho para el impulso a la investigación en enfermedades raras y que ha permitido que Europa haya pasado de ocho a 147 medicamentos huérfanos autorizados en dos décadas”.

AELMHU y Farmaindustria destacan la necesidad de que la nueva legislación europea continúe impulsando la I+D de medicamentos huérfanos

Nuevos biomarcadores

La mejora en el conocimiento de la enfermedad, el descubrimiento de nuevos biomarcadores de diagnóstico y la realización de cribados neonatales están llamados a ser también una revolución para estas personas en el campo del diagnóstico temprano, teniendo en cuenta que el 70% de las enfermedades poco frecuentes tienen un componente genético. La industria farmacéutica ve necesaria la agilización en este diagnóstico precoz y la puesta en común, a nivel de todo el SNS, que permita el acceso a estas determinaciones de manera ágil, coordinada y con equidad.

Además, en la actualidad, la mayoría de los nuevos medicamentos huérfanos que se autorizan fundamentan su eficacia en la presencia de un biomarcador. Medicamento y biomarcador siguen procesos de autorización y financiación diferentes, por lo que es necesario que exista una sincronización de manera que sea posible garantizar la disponibilidad de ambos, para que el paciente tenga el mejor tratamiento cuando lo necesita. Estos retrasos no solo son un drama para los pacientes, que, una vez terminado el ensayo, no pueden utilizar el medicamento hasta la decisión de financiación. También merman el atractivo de España para la inversión de compañías farmacéuticas en ensayos clínicos. Farmaindustria ha planteado al Ministerio de Sanidad una serie de medidas para corregir esta situación y mejorar el acceso a los medicamentos huérfanos, partiendo de la necesidad de reconocer sus peculiaridades.