Durante los últimos meses, los esfuerzos de la industria farmacéutica se han focalizado en combatir la pandemia de COVID-19. Y este esfuerzo, se ha traducido en un ajuste continúo a nuevas formas de vivir y trabajar. Con todos estos cambios, el impacto que la pandemia tendrá a largo plazo sobre el sector, es difuso; pero a corto plazo, muchas predicciones realizadas sobre el sector están relacionadas con el impacto de este coronavirus, como refleja un informe de EvaluatePharma. Este hace una previsión a nivel mundial del sector farmacéutico desde este 2020 hasta 2026.

Una de las principales preocupaciones que afecta ahora a este sector es la relativa a los ensayos clínicos. Y es que, desde la expansión del coronavirus, se han suspendido cientos de estudios y retrasado la emisión de conclusiones de los que estaban avanzados. Este problema repercutirá en que, cuanto más se prolongue esta situación, más probable será que las decisiones regulatorias disminuyan. Por supuesto, esto podría impactar en el acceso de los pacientes a nuevas soluciones médicas.

Por otra parte, desde la perspectiva macroeconómica, la pérdida de puestos de trabajo y productividad, indica que se producirá una recesión económica a nivel mundial. En caso de confirmarse, los gobiernos y los pacientes contarán cada vez con menos dinero para gastar en atención médica.

En este contexto, los inversores parecen haber dejado en segundo plano los riesgos de la pandemia a nivel económico, confiando en que estos fueran compensados con el potencial de los nuevos tratamientos sobre esta enfermedad. Aún con esta barrera, y teniendo en cuenta que el crecimiento del sector será menor que otros años, el objetivo para los productores de fármacos es trabajar para recuperar la actividad en todos los segmentos y minimizar el impacto al final del ejercicio 2020. 

Impacto de la COVID-19 en la industria farmacéutica 

Desde que comenzase el confinamiento, los analistas comenzaron a hacer sus previsiones sobre ventas en la industria farmacéutica a la baja. En total, se estima que el descenso en las ventas sea de alrededor de 5.000 millones de dólares. En este contexto negativo, MSD sería la compañía más perjudicada; esto se debe a que dos tercios de sus beneficios son de fármacos administrados por facultativos, lo que impacta directamente en las ventas. Por ejemplificar esta bajada en las ventas con un caso concreto, Keytruda tiene prevista una bajada en las ventas de 448 millones de dólares; a pesar de estas pérdidas, se espera que siga manteniendo entre los medicamentos más vendidos hasta 2026.

Medicamentos de prescripción

Para 2026, se estima que Roche ocupe el primer puesto en venta de medicamentos de prescripción a nivel mundial. Si esta previsión se cumple, la compañía suiza superaría a Novartis y Pfizer en la carrera por liderar la venta de estos fármacos. La estimación se realiza teniendo en cuenta el incremento de ventas de los medicamentos oncológicos Tecentriq y Perjeta; también de Ocrevus y Hemlibra, para la esclerosis múltiple y la hemofilia respectivamente. Otro de los aspectos que se espera que impulse la actividad en ventas de Roche es la adquisición de Spark Therapeutics y Promedior, como consecuencia de la diversificación de su cartera de productos.

Otra de las compañías con mejor pronóstico para 2026 sería Johnson&Johnson. Principalmente, el crecimiento en ventas de la misma, se estima basándose en el fuerte crecimiento de ventas de Darzalex, terapia indicada en oncohematología. También cabe destacar que este crecimiento se atribuiría a un hipotético éxito de la vacuna contra la COVID-19 en la que trabaja la compañía; esto se extrapolaría a corporaciones como AstraZeneca, GSK, Sanofi o Pfizer, aunque tendrían que reforzar sus ventas por otros productos para obtener resultados similares.

Según los datos que maneja EvaluatePharma, Novartis sería una de las empresas que experimentaría una mayor caída en medicamentos de prescripción entre 2019 y 2026. En esta cara negativa, se incluirían igualmente Pfizer y Sanofi; estas dos han sido las únicas del top 10 que han informado en el momento actual de una caída en ventas de medicamentos de prescripción entre 2018 y 2019.

Aumento de la cuota de mercado

Las únicas empresas que han comunicado una previsión de aumento en su cuota de mercado para 2026 son AstraZeneca, BMS y AbbVie. En el caso de BMS, la operación que más ha impulsado este crecimiento es la adquisición de Celgene. Para AbbVie, ha tenido un impacto muy positivo la adquisición de Allergan, suponiendo un movimiento estratégico ventajoso de cara a diversificar su cartera de productos; también, teniendo en cuenta la inminente pérdida de exclusividad de Humira que se producirá en 2023. Para AstraZeneca se prevé un aumento sostenido en su participación en el mercado; principalmente está atribuido a las ventas de medicamentos como Tagrisso, Lynparza en Imfinzi, que siguen situándose como los motores de crecimiento de la compañía británica.

En el ranking de las diez compañías con mejores ventas en cuanto a medicamentos de prescripción para 2026, Takeda quedaría fuera. Y es que, a pesar de adquirir Shire en 2019 y la contribución al aumento de los ingresos de la empresa, hay aspectos negativos. Uno de los remarcables, que la patente de Advate expiró en 2019, provocando una caída en ventas de alrededor de mil millones de dólares.

Haciendo un cómputo general, las diez principales empresas farmacéuticas perderían un 6,2 por ciento en la participación general en el mercado. Y Pfizer tendría una gran influencia en este fenómeno.

Crecimiento de la biotecnología

Cabe destacar que, de cara a los próximos años, se observa una tendencia cambiante hacia la biotecnología. Así, se prevé que estos productos adquieran una participación mayoritaria dentro de la clasificación de los 100 medicamentos principales en ventas para 2026, representando un 55 por ciento del total; esta cifra supone un incremento del 16 por ciento en comparación a los datos obtenidos en 2012. En este contexto, Roche seguiría siendo la empresa más importante en medicamentos biológicos.

Al analizar los datos pormenorizados de Roche destaca que, a pesar de perder el 5,8 por ciento de cuota de mercado debido a la pérdida de patente de biológicos. Entre estos se encuentran Avastin, Herceptin y Rituxan, representando los fármacos con mayor volumen en ventas de la empresa.

Otra previsión recogida en el informe es que Amgen caiga dos posiciones, por la pérdida de cuota de mercado de Enbrel (enfermedades autoinmunes), frente a fármacos similares de la competencia. Siguiendo este hilo, se estima que Novo Nordisk pase a ocupar la tercera posición, impulsado por el alto crecimiento previsto para los fármacos Ozempic y Ribelsus (fármacos contra la diabetes); de estos se espera que juntos registren unas ventas de alrededor de 15.000 millones de dólares para 2026.

Asimismo, el documento prevé que AbbVie deje de formar parte del top 10 en esta área. Este resultado se desencadenaría de la pérdida de patente de Humira en Estados Unidos para 2023. Por su parte, Novartis pasaría a formar parte de los diez primeros en este segmento con pronósticos de crecimiento por las ventas de Cosentyx y Entresto (indicados para la psoriasis y la insuficiencia cardíaca respectivamente); también se incluirían entre los fármacos que impulsen el crecimiento de la compañía los lanzamientos de Arzerra (leucemia linfocítica crónica) e Inclisiran (molécula, por el momento experimental, que está siendo estudiada para el tratamiento de la enfermedad cardiovascular aterosclerótica).

Investigación diversificada

El informe de EvaluatePharma también analiza cuáles pueden ser los proyectos más prometedores en investigación y desarrollo hasta 2026. La lista de iniciativas está diversificada en varias áreas terapéuticas, y con una participación masiva de grandes corporaciones; aun así, también queda hueco para que empresas de mediana capitalización se cuelen en el ranking.

En primer lugar destaca tirzepatida, fármaco antidiabético y contra la obesidad de Eli Lilly. Este ha subido en la clasificación gracias a la apuesta que Eli Lilly está realizando por el mismo, comparándolo en ensayos con Trulicity, fármaco que reporta grandes ventas a la compañía.

El segundo puesto lo ocuparía Novartis gracias a Inclisiran, molécula en estudio para la enfermedad cardiovascular ateroesclerótica. Este fármaco pasó a formar parte del pipeline del Grupo Novartis mediante la adquisición de la compañía The Medicines Company a principios de este año. La aprobación de esta terapia está prevista para el segundo semestre de este año, y se espera que este fármaco compita directamente con Repatha (Amgen) dentro de los fármacos indicados para esta afección.

También hay grandes expectativas en torno a aducanumab, fármaco de Biogen contra el Alzheimer. Este fármaco, creado a partir de la proteína beta amiloide, estaba previsto que se presentase ante la FDA a principios de 2020; los retrasos como consecuencia de la situación actual podrían provocar nerviosismo entre los inversores, teniendo en cuenta que podría ser el primer tratamiento nuevo contra este tipo de demencia en los últimos 15 años.

En el área de las enfermedades autoinmunes, Bristol-Myers Squibb cuenta con BMS-986165, un inhibidor de la tirosina quinasa en investigación para el tratamiento de la psoriasis. Se espera que este fármaco revele buenos resultados, y ayude a BMS a recuperar las ventas en el área de psoriasis, tras la venta de Otezla en la fusión de Celgene.

Especialidades diversas

Por parte de GlaxoSmithKline, destaca la entrada en el ranking de belantamab mafodotin, fármaco destinado al mieloma múltiple. Asimismo, Roche se cuela en los diez primeros puestos de proyectos de investigación prometedores con risdiplam, fármaco indicado para la atrofia muscular espinal. Esta terapia ha recibido una revisión prioritaria de la FDA pero ahora la compañía suiza está a la espera de una decisión definitiva que está prevista para finales de este mes de agosto.

Entre los proyectos de empresas de menor tamaño, se cuelan cuatro en el top 10. En primer lugar estaría la empresa argenx, con su inmunosupresor efgartimod, tras los buenos resultados cosechados en ensayos con pacientes de miastenia gravis generalizada. El siguiente puesto correspondería a la colaboración entre Vir Biotechnology y Alnylam en el compuesto ALN-HBV02; se trata de un terapéutico de ARNi para tratar las infecciones crónicas por Hepatitis B. Dentro de este grupo de empresas de capitalización mediana, también estaría Iovance Biotherapeutics, con sus terapias celulares que cuentan con la designación de vía rápida de la FDA para melanoma avanzado. La empresa que completa este grupo es Allakos, con un fármaco para esofagitis y gastritis, que actualmente se encuentra en la Fase 3 de los ensayos clínicos.

Ventas a nivel mundial

Una de las tendencias que se mantiene es que, en cuanto a medicamentos de prescripción, la oncología será la especialidad que aglutine un mayor número de ventas para 2026, como ya lo ha sido en los últimos años. En concreto, se prevé que acumule un 21,7 por ciento de la cuota de mercado. Dentro de este segmento destacará el comportamiento de los fármacos inmunoterápicos, de los que se estimar que crecerán alrededor de un 20 por ciento. Aquí, destacan productos como Keytruda (pembrolizumab, de MSD) u Opdivo (nivolumab, de BMS).

Como consecuencia de esto, también se espera que los inmunosupresores sigan creciendo, hasta incrementarse sus ventas en alrededor del 14,3 por ciento. En este contexto, se espera que despunten productos como Dupixent (Sanofi), Otezla (Amgen) o Cosentyx (Novartis).

En la otra cara de la moneda, el informe de EvaluatePharma recoge que los fármacos antirreumáticos decrezcan casi un 2 por ciento. Este fenómeno podría deberse a la entrada de nuevos biosimilares en el mercado, como los asociados a Enbrel (Pfizer), Remicade (Janssen) o Humira (AbbVie). Este último pierde la exclusividad de la patente en Estados Unidos en 2023, con lo que se espera que las ventas caigan en alrededor de 13 millones de dólares entre 2019 y 2026.

Ránking de productos

Sin agrupar los productos por especialidades, la consultora ha elaborado además un ranking con los diez productos que se estima que sean los más vendidos para 20206. Como se indicaba antes Keytruda, fármaco de inmunoterapia anti PD-1, sería el que encabezaría esta lista. También el segundo puesto sería para medicamentos inmunoterápicos, en este caso Opdivo, con un mecanismo de acción similar a Keytruda.

En el tercer puesto se encontraría Eliquis (apixaban), medicamento anticoagulante que se utiliza para prevenir tromboembolismos venosos y accidentes cerebrovasculares en pacientes que padecen fibrilación auricular. Biktarvy (bictegravir sodium; emtricitabine; tenofovir alafenamide fumarate) antiviral de Gilead Sciences utilizado en pacientes con VIH, ganaría la cuarta posición.

A mitad de la tabla, en el puesto quinto, se encontraría Imbruvica (ibrutinib) desarrollado por AbbVie y Janssen, un inhibidor de la Tirosina quinasa de Bruton utilizado para pacientes con linfoma de células del manto. También la oncología ocupa el sexto y séptimo lugar con Ibrance (palbociclib) de Pfizer, destinado a determinados tipos de cáncer de mama y Tagrisso (osimertinib mesylate), un inhibidor del factor de recepción de crecimiento (EGFR) indicado en cáncer de pulmón no microcítico. ´

Los tres últimos puestos de la tabla los ocupan fármacos de diferentes especialidades. En octavo lugar esta Dupixent (dupilumab), de Sanofi, inhibidor de interleuquinas 4 y 13 destinado a pacientes de dermatitis atópica, el asma y la rinosinusitis crónica con poliposis nasal. La novena posición es para Trikafta (elexacaftor, ivacaftor, tezacaftor) de Vertex Pharmaceuticals terapia avanzada para tratar la fibrosis quística. Por último, cierra la tabla con el décimo puesto del ranking Ozempic (semaglutida), de la farmacéutica NovoNordisk utilizado como fármaco diabético –que puede ser combinado con otras terapias- para evitar el desarrollo de enfermedades cardiacas en estos pacientes.


También te puede interesar…