María Cevey. Consultora sanitaria. Medical Science Liaison de Wecare-u.
La diabetes mellitus (DM) es uno de los retos más importantes a los que se enfrentan actualmente los sistemas sanitarios, siendo el control frecuente de la glucosa un parámetro clave, para un adecuado control metabólico así como para el ajuste del tratamiento farmacológico. Esta enfermedad crónica, que afecta a la producción de insulina en el páncreas y por lo tanto a los niveles de glucosa en sangre, produce graves complicaciones clínicas agudas y crónicas, constituyendo un problema de salud muy importante, ya que es una causa mayor de morbilidad y mortalidad afectando especialmente a las personas en edad productiva menores de 65 años . El mal control de esta patología, acelera las complicaciones y la mortalidad prematura. Sin embargo, un tratamiento precoz, multifactorial y un adecuado autocontrol, retrasan la aparición de complicaciones y mejora la calidad y esperanza de vida de los pacientes. A lo largo del día, una persona con diabetes debe tomar diferentes decisiones relacionadas con su alimentación, actividad física, y el ajuste adecuado de su tratamiento, principalmente en aquellos pacientes tratados con múltiples dosis de insulina. Es muy importante dotar al paciente de herramientas para que pueda controlar diariamente sus niveles de glucosa.